Añade un toque de historia, color y solidaridad a tu mesa con este precioso cuenco de cerámica, elaborado y pintado a mano por artesanos en Palestina.
Esta pieza única destaca por sus vibrantes patrones florales tradicionales en tonos rojos, azules y amarillos, reflejando la rica herencia cultural de su origen. Más que un objeto decorativo o funcional para servir aperitivos, este cuenco es un producto de Comercio Justo.
Tu compra apoya directamente el sustento digno de las comunidades artesanas palestinas, ayudando a preservar sus técnicas ancestrales en un entorno de trabajo ético.
Cada pieza es única debido a su naturaleza artesanal.